Los amores de antaño


1
Mis amores de antaño fueron las jornaleras:
Marta, la de la plancha, Inés, la costurera…
Ni rastro de nobleza. Disculpadme, Señor.
Eran, me objetaréis, bellezas ordinarias,
ángeles de arrabal o Venus chabacanas…
Son las damas de antaño que pude tener yo.
2
El corazón aún verde va donde va la vista
y La primera enagua que llega te conquista,
una simple pastora es un manjar real.
A falta de Marquesa, te ves con la criada,
en vez de flor de lis, tienes la humilde maya.
Cupido, en primavera, carga bien su carcaj…

K. J. Makowski, Planchadora

3
En la feria encontrabas pareja los domingos:
“yo te gusto, me gustas…”, y estaba todo dicho,
sin grandes sentimientos ni frases de rigor.
“Yo te gusto y me gustas, ¡andando, guapo hortera!”
En un tren de extrarradio, se viajaba a Citera,
y no era obligatorio llevar el corazón…

Toulouse Lautrec, En la cama, el beso

4
Clara no parecía gran cosa en un principio.
Su peletero, acaso, no cosía el armiño.
No se hacía su ropa en el taller de un dios…
Pero cuando, atrevida, sin reparar en nada,
para ti alegremente ella se desnudaba,
era Psique en persona, la novia del amor.

5
A la segunda cita a veces ya faltaba;
la pequeña amazona nos daba calabaza,
pero no era motivo para colgarse aún…
La margarita que arrancamos con María,
acabamos de deshojarla con Lucía,
y el amor se alegró, como en él es común.
6
Eran, me objetaréis, bellezas ordinarias,
ángeles de arrabal o Venus chabacanas…,
pero eran mis amores. Disculpadme, Señor.
Rosa, Lucía, Clara, Inés, la costurera,
Marta, la de la plancha, y Cruz, la lavandera…
Son las damas de antaño que pude tener yo.

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